WILLIAM
HOTEL DE DISEÑO


Desde el siglo XVIII, como fruto de un ordenamiento de la Ciudad de México, se empezaron a desenterrar piedras labradas por los aztecas, los ciudadanos, entusiastas por los descubrimientos arqueológicos empezaron a adosar esas piedras a las fachadas de sus casas, transformándolas  y dándoles un símbolo de prestigio y alto status.


Tres siglos después el diseño mexicano vuelve a referenciar el pasado prehispánico a partir de objetos que forman parte de la identidad nacional. Como prueba de estos ejercicios de resignificación de la arqueología mexicana, se encuentra la obra de William Spratling (1900-1967), artista norteamericano conocido por su influencia en el diseño de la platería y el mobiliario mexicano de la época, quien fundara el primer taller dedicado al trabajo artesanal de la plata en Taxco y en el que dedicaría sus días a la enseñanza de este oficio a los oriundos de la región.


La reinterpretación de la estética de las culturas prehispánicas según la perspectiva de William Spratling  fue lo que inspiró a un grupo de jóvenes, pero experimentados diseñadores mexicanos a darle vida a los interiores de esta casona en el centro de Taxco, Guerrero y   que hoy abre sus puertas  como  un hermoso y exclusivo  hotel boutique de 15 habitaciones, refrescando el panorama del diseño neo prehispánico.


Para la restauración y el interiorismo de este espacio se utilizaron materiales vernáculos de la región de Guerrero, como losetas de pasta artesanal, tejido de palma, madera tallada a mano, entre otros.


La paleta en tonos verdosos simboliza la fascinación por lo natural, el cambio, el movimiento, la abundancia, la suerte y esencialmente porque  este color ha permanecido en nuestra cultura desde tiempos prehispánicos


Mención especial para el mobiliario diseñado puntualmente para el proyecto, tratándose de piezas que exploran la cosmología prehispánica, resignificando algunas piezas del mobiliario del Maestro Spratling  defendiendo  y resaltando  el peso emocional, mitológico e identitario del país.



Un diseño verdaderamente mexicano.

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